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Georges Méliès. La magia del cine

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Viaje a la Luna (1902)

 

Georges Méliès
La magia del cine
CaixaForumMadrid.Del 26 de julio al 8 de diciembre
Paseo del Prado, 36. Madrid


Georges Méliès (1861-1938) además de director de cine, fue dibujante, mago, director de teatro, actor y decorador. Entre 1896 y 1912, realizó más de 500 películas donde demostraba su habilidad en el trucaje cinematográfico. Aportó al cine el sueño y la magia. Méliès, deseoso de explotar las posibilidades artísticas del nuevo invento -los hermanos Lumière se dedicaron a la filmación de escenas de la vida cotidiana-, introduce por primera vez la ficción en el cine. Gracias a su dominio de los efectos especiales, aplicó al séptimo arte la técnica del ilusionismo, la pirotecnia, los efectos ópticos, los fundidos encadenados, la linterna mágica, el coloreado y los efectos de montaje.

Hijo de un empresario del calzado, invirtió la herencia de su padre en comprar el teatro de su maestro, el mago Robert-Houdin. Junto con el modesto local, adquirió todos los inventos y artilugios que desarrolló Houdin a lo largo de su vida. Los hermanos Lumière se negaron a venderle una de sus cámaras, Méliès entonces adquirió un cinematógrafo creado por el óptico inglés Robert William Paul; comenzaba la magia.

 

El hombre de la cabeza de goma. (1901)

 

Dedicó meses al rodaje de Viaje a la Luna (1902), en la película muestra  toda su pericia en el arte del trucaje escénico, la prestidigitación y los efectos especiales.

La exposición presenta una impresionante colección de películas, dibujos estereoscópicos, discos estroboscópicos, máquinas, vestuario y diversos objetos propiedad de La Cinémathèque françaiser. Destaca  la primera cámara que Méliès utilizó en sus filmaciones o el vestuario original de Viaje a la Luna.
Méliès probó las mieles del triunfo y la amargura del olvido, en un ataque de ira destruyó los negativos de sus películas; afortunadamente su legado ha llegado hasta nosotros gracias a la enorme repercusión que tuvo su obra.

 

Que nuestra habilidad sea crear leyendas a partir de la disposición de las estrellas,
pero que nuestra gloria sea olvidar las leyendas y contemplar la noche limpiamente.

Leonard Cohen