“Hemos sido un país
-salvas las pertinentes excepciones, que son notables- muy
bruto.
Un país al que la cultura no le ha importado”.
Hablando de “malditos”, sus aproximaciones
a Gil de Biedma, Cavafis, Oscar Wilde...
muestran cómo figuras incontestables de la cultura
sufrieron en su tiempo la incomprensión y el
rechazo...
Me ha interesado siempre ese tipo de person-
ajes fuera de lo común. Personajes marginados,
excéntricos, diferentes, eso me ha interesado mucho
y le he dedicado muchos libros.
Personajes de muy diferente estilo, de muy diferentes
culturas, pero siempre dominados por el malditismo,
por el decadentismo, por la extravagancia o por la
disidencia.
¿Qué queda en la actualidad del ambiente cultural
madrileño de finales de los 70?
No queda nada. La vida, si tiene algo, es que va
destruyéndolo todo. Alguna vez lo que se construye
es mejor y otras veces peor, pero siempre cambia.
Ha realizados varias antologías dedicadas a los
nuevos poetas, ¿cuál es el momento actual de la
poesía en España?
La poesía joven -entendiendo joven de cuarenta años
para abajo- está en una situación realmente confusa.
Un ejemplo lo da una antología última, surgida de la
universidad de Granada, que verdaderamente viene a
no aclarar nada y donde la mayoría de los opinantes
opinan por cercanías de amistad.
Además, los jóvenes actualmente tienen unos
niveles culturales muy bajos. Cuando los de otras
generaciones llegábamos a todo muy pronto, ellos
llegan muy tarde por culpa de los planes de estu-
dio que los hacen ser mayoritariamente ignorantes,
con unos grados de ignorancia que a veces resultan
pavorosos.
En este momento, en poesía están muy despistados.
El hecho de que la poesía tiene pocos lectores, junto
con el despiste de los nuevos poetas (porque les falta
conocimiento, les faltan lecturas, les falta hondura),
hace que los libros de valor aparezcan alrededor de los
cuarenta años.
Ophüls, Pasolini, Visconti...debido a su pasión por
el cine ¿ha sentido la necesidad de participar de
manera directa en la creación de una película?
En mi generación todos hemos sido muy cinéfilos.
Nos hemos educado mucho en los libros y en el cine.
Más que ahora, por cierto, entre otras cosas porque se
veía mejor cine.
La verdad es que ahora todo ha decaído muchísimo.
Los niveles de ahora son vergonzosos: de miseria, de
poquedad, de ignorancia, de falta de cultura...es tan
inmenso que es como para echarse a llorar realmente.
Me gusta mucho el buen cine (no me gusta el cine de
efectos especiales, que me parece una bobada para
mentes infantiloides que son las que tiene la mayoría
de la gente hoy), soy un espectador y un estudioso del
cine, pero nunca he tenido afán de ser director, quizás
cuando era muy joven.
En mi generación todos queríamos ser de todo:
directores
de
cine,
pintores,
escritores...y
director de cine es muy difícil serlo porque, aparte
de la dificultad que pueda tener en sí misma, es una
cuestión que tiene que ver con la producción. Se
necesita mucho dinero, tienes que meterte dentro de
la industria, las concesiones enormes que tienes que
hacer a los productores. Todo eso me apartó de la idea
de ser director de cine.
Recientemente pudimos asistir a la precipi-
tada exhibición pública de los “no-huesos” de
Cervantes. Da la impresión de que gran parte de la
clase política utiliza la cultura como mero aparato
de propaganda..
.
España ha sido un país muy descuidado con la
cultura, con los grandes hombres.
Sabemos dónde estaba la tumba de Velázquez y dónde
estaba la tumba de Cervantes, pero no se conservan.
Me parece muy patético a estas alturas tener que andar
buscando unos huesos de Cervantes que se sabe que
están enterrados en esa iglesia. Después de todas
esas averiguaciones -que han costado mucho dinero
además-, ahora aparecen dos trozos de hueso que no
sabemos si son de Cervantes o no, porque no se puede
probar por el ADN.
En ese sitio está Cervantes, pero nadie cuidó la tumba,
por tanto, la tumba se estropeó y los huesos se mez-
claron con otras tumbas adyacentes. De la misma
manera se sabe dónde estaba enterrado Velázquez,
pero la iglesia fue destruida por los franceses en la
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