Página 35 - Revista la Laguna - 3-Andalucia

Versión de HTML Básico

a UGT Andalucía se le diera 60 millones de Euros en
un año, a
CC.OO. 58 millones de Euros y a la patronal CEA
se le dieran también 60 millones de Euros. Estas
cosas no pueden ocurrir, el dinero público no es de los
políticos, y tiene que existir un criterio justo a la hora
de repartir el dinero a unos o a otros. En Huelva lle-
vamos atendiendo a los inmigrantes 25 años, presen-
tamos un proyecto y nos dieron 1.000 Euros, para esa
misma finalidad UGT y CC.OO. recibieron 300.000
Euros cada uno.
Continuamente vemos protestas, huelgas de estu-
diantes, sanitarias, del sector del trabajo social, etc.
La represión va en aumento y muestra de ello es la
nueva Ley de Seguridad Ciudadana, ¿volvemos al
pasado en lugar de avanzar?
Este sistema capitalista del libre mercado
resuelve sus crisis arrebatándole al pueblo sus dere-
chos y complementando esa pérdida de derechos con
la represión. Saben perfectamente que están aplicando
unas leyes injustas, y para que el pueblo no se mueva
añaden también la represión. Para ello tienen el poder
de los jueces, de las fuerzas de seguridad, incluso el
Fiscal General del Estado lo elige el Gobierno. Se in-
tenta evitar que haya ejemplaridad en la lucha, en la
pelea, para que eso no contagie al resto de la sociedad.
El SAT es un sindicato que desde el año 2008 viene
golpeando contra la injusticia, y que por las razones
que sea ha llegado a tener un cierto prestigio en la so-
ciedad, tanto en Andalucía como en el resto del Es-
tado. Nos ven como un peligro, y se intenta por todos
los medios reprimir al movimiento obrero.
Uno de los emblemas, ejemplo pragmático de
las reivindicaciones del sindicato, es la finca de
Somonte, ¿cómo evoluciona ese proyecto y los
demás proyectos de cooperativas?
Somonte se ocupó el 4 de marzo de 2012, es-
tamos intentando regularizar su situación para
poder demostrar que en las mismas condiciones
que los demás propietarios, esa finca puede dar mejor
resultado que el que está dando con la gestión de la
Junta de Andalucía. Pero ellos no quieren regularizar
esa situación, porque si dejan que accedamos a las
ayudas de Europa y empezamos a sembrar cultivos
sociales, arboleda, olivos, etc, y empezamos a dar jor-
nales, queda en evidencia que las fincas en manos de
la Junta o del Estado no son útiles.
¿Cómo van los planes de convergencia con otras
organizaciones sindicales, partidos políticos o el
famoso bloque crítico que se ha creado aquí en
Andalucía?
Bien, aunque con toda la dificultad que sabemos
que tiene la izquierda siempre a la hora de unificar
posturas, criterios y planteamientos. La prueba fun-
damental va a ser el 22 de marzo, en la marcha que
tenemos prevista para Madrid. Ahí el bloque críti-
co y toda la sociedad andaluza tiene que tener una
actitud firme, coherente, y no nos pueden dividir las
banderas, ni las comas, ni los puntos, ni el comuni-
cado final. Lo que nos tiene que unir es el derecho
del pueblo de conquistar lo que le están quitando, y
decirle a los gobiernos, y a la Troika, que no represen-
tan a los pueblos aunque tengan su voto, que se vayan.
¿Bastaría un cambio de gobierno o se necesitaría
un cambio social?
Hace falta un cambio de gobierno, un cambio
de mentalidad, un cambio de política y un cambio
evidentemente de sistema. El sistema económico de
libre mercado tiene una enfermedad que no se cura
con Aspirina, necesita bisturí. Hay que abolir el sis-
tema capitalista y crear una sociedad mejor, donde en
el centro de todo estén las personas.
35
Fotografía de Carmen Pascual