Página 48 - Revista la Laguna 4

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Museo Thyssen-Bornemisza
Paseo del Prado 8. 28014, Madrid
10 de junio al 14 de septiembre de 2014
l Museo Thyssen-Bornemisza
presenta este verano Mitos del pop,
la primera exposición en Madrid
desde la muestra Arte pop del Mu-
seo Reina Sofía de 1992. Más de veinte años
después, la comisaria Paloma Alarcó, Jefe de
Conservación de Pintura Moderna del Museo
Thyssen, propone una visión renovada de esta
corriente artística desde la perspectiva que nos
ofrece el siglo XXI. Con una selección de más
de cien obras, que incluyen tanto la experiencia
pionera del pop británico como el pop clásico
norteamericano y su expansión por Europa, la
muestra pretende rastrear las fuentes comunes
del pop internacional y realizar una revisión de
los mitos que tradicionalmente han definido
al movimiento. El objetivo es mostrar que las
míticas imágenes de artistas tan significativos
como Warhol, Rauschenberg, Wesselmann,
Lichtenstein, Hockney, Hamilton o Equipo
Crónica, entre otros muchos, esconden un
irónico y novedoso código de percepción de la
realidad, un código que aún sigue vigente en
el arte de nuestros días. La exposición cuenta
MUSEO THYSSEN
E
Autorretrato
mitos
del
pop
48
Lata grande de sopa Campbell’s rasgada (1962). Acrílico sobre lienzo, 183x137 cm
Andy Warhol
con la colaboración de Japan Tobacco Interna-
tional (JTI) y reúne obras procedentes de más
de cincuenta museos y colecciones particulares
de todo el mundo, con préstamos destacados
de la National Gallery de Washington, la Tate
de Londres, el IVAM valenciano o la prestigi-
osa colección Mugrabi de Nueva York, por citar
solo algunos.
Más que ninguna otra corriente artística con-
temporánea, el arte pop capturó de inmediato
la imaginación popular. Su aparición a finales
de los años 1950 y comienzos de los 60 fue uno
de los momentos más liberadores de la histo-
ria del arte; y no solo resultó atrayente para el
gran público, sino que la radicalidad de su de-
safío cautivó también a numerosos círculos in-
telectuales. Frente a la extenuación que provo-
caba por entonces el idealismo del movimiento
moderno, introspectivo y utópico, el arte pop
proponía a las nuevas generaciones todo un ex-
citante mundo secularizado en el que ya no ex-
istían límites entre la alta y la baja cultura, entre
lo artístico y lo profano.