Página 37 - Revista la Laguna - 3-Andalucia

Versión de HTML Básico

ndalucía es una de las regiones más po-
bres del estado español, y por lo tanto
también una de las más pobres de la
Unión Europea de los 15. Por supuesto,
me refiero a pobreza económica: Pro-
ducto Interior Bruto, tasa de desempleo, tasa de
pobreza, desigualdad en la renta, etc; y no de otro
tipo de pobreza, ya sea natural, geográfica, cultural,
literaria, musical, climática, gastronómica, social,
lingüística, etc, ámbitos en los que precisamente
nuestra tierra no sufre ninguna carencia sino todo
lo contrario. Ahora bien, es inevitable reconocer
que la dimensión económica es una de las más im-
portantes en relación al bienestar de la población, y
por eso no podemos sino lamentar que Andalucía
se sitúe a la cola en ese ranking tan particular.
Y esto es algo que se conoce ampliamente. Sin
embargo, lo que no se conoce tanto es el por qué.
Ya sea en los centros de enseñanza, en el telediario,
en la prensa, o en alguna tertulia de radio, hemos
escuchado alguna vez que la región andaluza es
una de las más pobres del estado, pero jamás he-
mos oído hablar sobre los motivos que han llevado
a que esto sea así. Como mucho –y desgraciada-
mente– habrán llegado a nuestros oídos algunas
vagas reflexiones al respecto que desde luego es-
tán más impregnadas de prejuicios que de análi-
sis científico: que si los andaluces somos vagos
por naturaleza, que si el sol y el buen clima nos
roban las ganas de trabajar, que si el gobierno de
la comunidad legisla en perjuicio del crecimiento
económico, etc.
En realidad es muy difícil verificar si estos
factores explican en mayor o menor grado el nivel
de desarrollo económico andaluz. Al fin y al cabo,
podría haber algo de verdad en esas aseveraciones,
aunque fuese poco y aunque hubiesen acertado
simplemente por azar y no por haber realizado
un análisis profundo y pormenorizado. Ahora
bien, de lo que no cabe duda desde una perspec-
tiva económica científica es que en los mayores
o menores niveles de desarrollo económico de
una región hay factores explicativos que tienen
muchísima más fuerza que los que se acaban de co-
mentar. Estos factores no son ni más ni menos que
los recursos (naturales, humanos, tecnológicos,
etc) del territorio, los medios de producción, la
distribución de la renta, la profundidad y la articu-
lación del tejido productivo, los canales de finan-
ciación, el comercio con otras regiones, etc. Frente
a estos, los aspectos psicológicos, ambientales o in-
cluso legislativos palidecen fuertemente. Es decir,
ya puede tener una región a los habitantes más
perezosos del planeta, el mejor clima del universo
y/o una legislación inadecuada, que si goza de un
poderoso aparato productivo, de unas tecnologías
avanzadas, de recursos naturales y humanos abun-
dantes, y de una distribución de la renta relativa-
mente equitativa, esta región estará muy lejos de
A
EL ATRASO ECONÓMICO DE ANDALUCÍA
POR EDUARDO GARZÓN ESPINOSA
TIENE RESPONSABLES
37